La necesidad de atención humana directa y de calidad, que deben recibir las personas mayores que no pueden realizar tareas de autocuidado y que ya sea por motivos personales o económicos dependen, en ocasiones,  de una persona no profesional que dedique su tiempo para su aseo, alimentación, vestido, etc, imponen la generalización de un proyecto de formación dirigido a  este tipo de personas que incluya los conocimientos sobre la vejez, los grados de dependencia, las ciencias que ayudan en el cuidado y tratamiento de estos ancianos y las características generales del anciano sano.

También dirigido a profesionales del sector para refrescar y afianzar conocimientos.